lunes, octubre 26, 2009

PERDONAME...

Mi corazón ya no entiende más tu idioma
si quieres estar sola,
para que me abris

creyendote presiento que me extrañas

estaré alucinando, parece que no

No te preocupes la condena me empieza a caer
yo que creía que sentías lo mismo que ayer
Perdóname, me equivoqué
perdóname, me equivoqué

perdóname, me equivoqué

perdóname, me equivoqué

Oí tu voz que susurraba algo

yo entendía lo contrario de lo que haces

siempre me haces equivocar,
siempre me llevas al mismo lugar

si ya te ganaste mi pecho roto

para que insistir mandando fotos

No te preocupes la condena me empieza a caer
yo que creía que sentías lo mismo que ayer

Perdóname, me equivoqué
Perdóname, me equivoqué

perdóname, me equivoqué

Estaré aluciando
yo creo lo contrario...




domingo, octubre 04, 2009

TRAICIÓN ...

Como enfermeras, conocemos los secretos de todo el mundo: sus historiales médicos, historiales sexuales, información confidencial, que es tan esencial para una enfermera como para un bisturí del 10. Y cada latido es peligroso.

Guardamos secretos, tenemos que hacerlo. Pero no todos los secretos pueden ser guardados.

De algún modo, la traición no se puede evadir. Cuando nuestro cuerpo nos traiciona, la cirugía a menudo es la llave para la recuperación. Cuando nos traicionamos los unos a los otros, el camino de la recuperación es el menos claro.

Hacemos lo que sea para reconstruir la confianza perdida. Y si hay heridas, algunas traiciones son tan profundas que no hay modo de reparar lo que está perdido. Y cuando eso ocurre, no hay nada que hacer más que esperar ...